El campeonato mundial
A veces, trabajar en la librería es un poco como jugar en la media cancha. Quieres marcar, tanto a las personas como los goles, recuperar, distribuir, ordenar, avisarle a uno que le llegan por un lado al tiempo que te muestras para recibir el balón y darle aire a la jugada. Hoy, el técnico me dijo que mi deber era limpiar la zona, pero luego llega el dueño del equipo y me dice que abra espacios para los delanteros y por último, llega una oportunidad de gol, y me pasó el resto del encuentro sin encontrar el pendejo libro. Ingrato eso de jugar en la media cancha.
P.D.: Alguien debe perder. Alguien debe perder este verano.
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