¡Basta de mitos!

Lograr que lean todo tu libro NO es una de tus habilidades como narrador. Si compras un libro, lo lees. El precio del libro te hace leerlo. El hecho de que no se acabe el texto hasta la última página te hace leerlo. La curiosidad natural te hace leerlo. (Tampoco es una habilidad narrativa vender un libro a una editorial.) El caso extremo es el que nos ha hecho creer que para mantener la atención del lector se necesita algo asi como una buena escritura. Cuando el lector de plano se asquea, se aburre o se desespera deja el libro. Pero en realidad la habilidad está en derrotar esas normas sociales detrás de su compra. Detrás, por así decirlo, de la estructura editorial. Hay que molestar verdaderamente al lector para que deje al texto. La ausencia de esa habilidad para incomodar no es a su vez una habilidad. Sólo se necesitan palabras para que sigamos leyendo.